diciembre-enero 2023, AÑO 22, Nº 90
Editora
Consejo editor
Columnistas
Colaboran en este número
Curador de Galerías
Diseño
¿Quiénes y cómo lo leyeron antes a Juan Gelman?, ¿junto a quiénes?, ¿a una distancia prudencial de qué otras escrituras?, ¿a quiénes leía él?, ¿cuál es su biblioteca? O también: ¿a qué tiempo y lugar pertenece su obra poética?, ¿es posible pensar la relación entre poesía y luchas políticas del siglo pasado en la misma estela que las luchas que conciernen al presente? “Un autor de los sesenta que –sin contar sus prosas– publicó un tercio de sus libros de poesía (una decena de títulos) entre 1993 y la primera década de este siglo”, escribe en la presentación Miguel Dalmaroni, señalando la extraña ubicuidad del poeta dentro de la literatura. Siguiendo esta pista, los siete ensayos reunidos en el libro Política y tiempos del poema. Sobre la escritura de Juan Gelman, compilado y prologado por Dalmaroni, piensan, leen y (re)ubican, desde recorridos y recortes diversos, la escritura de Gelman. Al final de los ensayos, además, se incluye una entrevista inédita al poeta, realizada en el 2002 por Ana Porrúa y Dalmaroni.
“Los comienzos de un joven poeta comunista” es, justamente, el ensayo que abre la serie, firmado por Dalmaroni, el cual tiene como objeto las resonancias que se extienden de las elecciones iniciales de su obra en la escritura posterior. Dalmaroni lee, en su primer libro, la pregunta “quién me manda” la cual, acción del tiempo mediante, se deslizará hasta volverse una clave de su lengua poética singular. Es decir, desplazando la voz del poeta intelectual y del PC, la tradición política de Gelman se alojaría en las exploraciones “incesantes y extremas” capaces de llevar el lenguaje hasta sus bordes. Bordes, pero también límites, contorsiones y momentos de inflexión puntúan el ensayo “Ojo es ojo. A partir de Fábulas” escrito por Mario Arteca. Fábulas se presenta, en este ensayo, como punto clave de la obra de Gelman, en la medida en que “lo separa de la estética de los 60 y lo promueve hacia la próxima década”. Arteca señala la gesta de Gelman en este libro: impulso o salto del decir de una época, la del sesenta, hacia un lenguaje intraducible que piensa al poema en tanto “artefacto inficionado por la lengua”.
“paraíso terrestre donde sembrar miguitas en el insomnio del exilio”, concluye el escrito fragmentado y punzante de María Negroni, quien, a partir de una sutil selección de versos, empuja a escuchar el poema. En “Comentarios Iluminados. Juan Gelman sobre Teresa De Jesús”, Negroni desglosa los Comentarios que Gelman escribe durante sus años de exilio, entre 1978 y 1979, y señala el modo en que dejan oír el desconcierto, la consternación y la pena. Una palabra poética que funciona, dice Negroni, como “puente entre ningún lado y ningún lado”. Por su parte, en el siguiente ensayo, Martín Kohan recorre las cartas escritas por Gelman –Carta abierta, Carta a mi madre y “Carta abierta a mi nieta o nieto”– en tanto vías posibles para responder a la muerte, al exilio o a la desaparición. En estas cartas, según el análisis de Kohan, se abre toda la “dimensión de poeta” de Gelman.
¿Por qué ha quedado sesgada la obra de Gelman entre los poetas de los noventa o los dos mil?, es una de las preguntas centrales que atraviesa el estudio de Ana Porrúa. En “Lecturas antológicas de Juan Gelman. El poeta dividido”, Porrúa indaga detenidamente las distintas antologías en las que fue incluido Gelman y los criterios que motivaron estas elecciones, los recortes que se propusieron de su obra, el Gelman que se dio a leer en cada caso. Poeta político, poeta internacional, poeta del exilio, poeta místico, la trayectoria de Gelman lo posiciona como una de las figuras centrales de las antologías de poesía argentina y latinoamericana.
En “La poesía de hoy en dos cadenas de supermercados y tres recetas de cocina. Gelman en el siglo xxi”, Matías Moscardi propone leer las resonancias del poema “Camarones” de Gelman en escritos post dos mil. Presenta, así, continuidades, a partir de las coordenadas del presente y del capitalismo, entre el poema de Gelman y “Supermercado Makro” de Daniel García Helder. Luego, en un cruce que se extiende a través de la comida, piensa posibles relaciones entre el mismo poema de Gelman y “Oda al caldillo del congrio” de Neruda, primero, y “Para hacer una torta sin leche” de Sergio Raimondi, después.
El último ensayo, firmado por Jorge Monteleone, se titula “¿Y si fuera? La última poesía de Juan Gelman (2001-2013)”. Como el título promete, Monteleone propone una lectura de los libros publicados durante el 2001 y el 2013 a partir del trauma. Volviendo la mirada sobre las condiciones históricas y sociales que atravesaban especialmente el ensayo de Kohan, Monteleone lee los últimos trabajos poéticos de Gelman como una vía de “reelaboración y resignificación del trauma”. De este modo, la proeza de la poesía de Gelman consiste en enfrentarse, mediante la exploración del lenguaje y de lo poético, a uno de los traumas históricos más dolorosos: la desaparición forzada de personas producida por la dictadura militar. Al referirse a su último libro, el ensayo presenta a Gelman como un poeta del siglo XXI: “Con ese libro incesante y final la poesía de Gelman volvía, vuelve, a empezar”.
Antes que relecturas sueltas de Gelman, los ensayos agrupados son, como señala Dalmaroni, un libro sobre el tiempo: “sobre lo que la poesía hace con el tiempo, y lo que el tiempo con la subjetividad”.
En relación con el tiempo, un leve desplazamiento:
Tuve la posibilidad de leer los ensayos antes de la versión final. Esta segunda lectura, entera, de principio a fin, la hago meses después desde otro país, casi en simultáneo a una conversación que desde que salí de Argentina parece no terminarse sobre poesía y, especialmente, poesía argentina. A esto se agrega un dato contundente: es octubre y las elecciones presidenciales nos empujan a la preocupación más extrema. Parte de esta suma de circunstancias hizo que el título que da nombre al libro cobre sentido de consigna. Porque si en una primera lectura “Política y tiempos del poema” convocaba, para mí, las zonas de interés de los ensayistas sobre la escritura de Gelman, ahora se deja leer, además, una invitación: sobre –o con– las escrituras de Juan Gelman, sostener los tiempos de la política y del poema.
(Actualización diciembre 2023 – febrero 2024/ BazarAmericano)