diciembre-enero 2023, AÑO 22, Nº 90
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Como el cover homenaje que hace el músico, escribir sobre un autor es tratar de ser poseído, tomado por él, aunque sea en una migaja, en una visión mínima de él en el balcón, en un evento con su círculo, llegar a él.
Del tercer autor hombre ruso que consigno en esta respuesta de pregunta silenciada, Daniil Jarms, es el ahora dicho.
Isak Dinesen, en el Joven del clavel dice del escritor que “iba bien vestido, con una gorra havelock; toda su indumentaria tenía aspecto de nueva, y efectivamente lo era.”
Esa gorra en los algoritmos locales es una gorra al estilo soldado imperial del Japón.
Cuando estoy en la puerta del cine la chica rusa me dice que Jarms es un escritor que no conocen mucho y que a ella y a sus amigxs les gusta.
El film Kharms intercala pasajes de su obra y hechos autobiográficos. Anne Carson dice de Kharms- acá Jarms, en Red Doc.
“El rostro de DK sobre la tapa es pura furia y labios de niña. G imagina someramente como salva la vida de DK -descendiendo en picada hacia la ventana del hospital de la prisión estatal con un plato de sopa humeante… pero la cruda realidad es que ningún plato de sopa podría haber mantenido vivo a Daniil Kharms los 900 días restantes del sitio de Leningrado…”
Así es su cara que también ilustra las portadas de los dos libros que tengo acá, Jarms: El cuaderno azul & otros escritos, de La Tercera Editora y No sé por qué todos piensan que soy un genio, editado por Ivan Rosado.
Según Anna Ajmatova: “logró hacer lo que casi ningún otro: escribir la prosa que caracterizó al siglo XX”.
¿Y cuál sería la prosa del presente siglo?
Los cuentos del Daniil Jarms podrían ser enviados al espacio exterior. Porque definen muy bien lo absurdo de todo. ¡Esos humanos de Jarms parece que no tienen nada en la cabeza!
La palabra Cuento implica como el tronco de un árbol una consistencia a la altura de la naturaleza. La palabra Relato, a mi parecer, es una historia contada al lado de un fogón, una historia corta. Cuentos por ejemplo serían los de Isak Dinesen, leídos en periódicas sentadas. Relato sería lo de Jarms, un libro que entra en tu bolsillo, lo lees en el camino con gente o solo en tu cama te reís solo también. Texto sería la unión de palabras que relatan una historia, o simplemente es una unión de palabras, algo, un momento en el mundo. Todo esto dentro de un libro.
En la película sobre Jarms (con Kh tiene hasta otro sentido), en varias ocasiones se lo ve caminando con su pipa por la calle y ¡oh casualidad, con el gorro havelock! Un tricornio, a lo Marianne Moore, podría ser distintivo. Pero ese es el gorro del que habla Dinesen, por la época y la onda del poeta. Jarms, Kharms, acá te invoco.
Son muchas cosas, muchas cosas. Hacer un texto, una palabra detrás de otra. Un relato, crear un mundo en la natura. Mientras pasa el tiempo veo que una voz dice lo que quiere, que su libertad es suya. La voz que los dice.
(Actualización abril – mayo 2021/ BazarAmericano)